Investigación// Estudio reveló imaginarios sobre la vejez de las mujeres en Chile
La investigación, en la cual participó Paula Cornejo, estudiante de Sociología U. Mayor, y que fue publicada en Brasil, mostró que los principales temores se asocian a la salud, las bajas pensiones y la soledad.
La vejez involucra cambios en diferentes niveles: fisiológicos, biológicos, psicológicos y sociales, siendo las mujeres uno de los grupos que presenta mayor vulnerabilidad en el país.
En ese contexto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que la esperanza de vida en Chile es de 80,5 años, pero las mujeres son mucho más longevas (83 años) que los hombres (79 años), lo que implica repensar temas como salud y pensiones.
Estos datos, que dan cuenta de la realidad local, son parte de las causas que generan un imaginario social negativo, que quedó refrendado en un artículo publicado por académicas chilenas en la revista Iluminaras de Brasil. Entre ellas se encuentra Paula Cornejo Abarca, estudiante de la carrera de Sociología (continuidad de estudios) de la U. Mayor.
Según el estudio, existe una distancia entre lo que las mujeres esperan de esta etapa de su vida y lo que efectivamente sucede, lo cual estaría determinado por dos tipos de percepciones. Por una parte, hay una positiva, asociada a la experiencia individual, mientras que el imaginario social de la vejez es negativo, debido a factores como las bajas pensiones, un sistema de salud precario o la soledad.
De acuerdo a Paula Cornejo, los sistemas de salud y pensiones cumplen un rol central. “En las mujeres entrevistadas, tanto profesionales como no profesionales, surge la noción de que la vejez sería aún más difícil en Chile, debido a que el país presentaría un sistema de pensiones y un sistema de salud precario”.
La familia: una pieza clave
A partir de los resultados del trabajo, las académicas también concluyeron que la familia juega un rol clave, tanto como soporte económico como afectivo.
Desde el punto de vista económico, se transforman en un complemento para suplir las bajas pensiones, presentando ciertos matices de acuerdo al nivel educacional. En mujeres no profesionales esto se evidencia con más frecuencia y en las profesionales no, debido a que tienen o esperan tener otros medios para suplir dicha carencia.
En tanto, el componente afectivo es central, independiente de la edad y del nivel educacional. Aquí, la familia ocuparía un rol clave para evitar la soledad, que surge en el imaginario social de la vejez.
La investigación también reveló que las mujeres asocian la vejez con la falta de autonomía, producto del empeoramiento de la salud física y mental. En este último punto, surge el temor a depender de otros ante enfermedades como la demencia, el Alzheimer o la invalidez.
El equipo de académicas realizó 50 entrevistas semiestructuradas a mujeres profesionales y no profesionales, de cinco rangos etarios (20-35; 36-45; 46-65; 66-75; 76 años y más).
El artículo es parte de una investigación mayor sobre trayectorias laborales de mujeres y vejez en Chile (CONICYT/FONDECYT 11150862) a cargo de la doctora Rosario Undurraga, académica de la Universidad Finis Terrae, donde Paula Cornejo fue ayudante de investigación por tres años. El artículo titulado Imaginarios de vejez. ¿Cómo perciben la vejez las mujeres en Chile? se publicó en una revista indexada brasilera llamada Iluminuras.