Emprendimiento// Kinesiología: La carrera que refleja el ADN emprendedor en la U. Mayor

Durante 2018, esta Escuela contó con 9 proyectos en el III Concurso Nacional de Emprendimiento, que finalmente dio por ganador a una de estas iniciativas. Además, 3 de sus profesores fueron seleccionados para ser coach de la D-School que comenzará a funcionar en marzo. ¿Cómo esta carrera se convirtió en una fábrica de ideas creativas?

Nutrición, Ingeniería, Diseño, Agronomía, Tecnología Médica, Construcción Civil, Odontología y Kinesiología. Estas fueron parte de las carreras que presentaron los 46 proyectos que compitieron en el III Concurso Nacional de Emprendimiento organizado por la U. Mayor. El certamen, realizado durante noviembre, finalmente dio por ganador a “Propsens”, una iniciativa desarrollada por cinco estudiantes de la Escuela de Kinesiología y que consiste en una plataforma biomecánica de tobillo. Sin embargo, esta no fue la única iniciativa que esta Escuela presentó, puesto que otras 8 también se destacaron, demostrando el interés de los futuros kinesiólogos por el emprendimiento y la innovación. 

Según su director Fernando Lira, este fenómeno está vinculado fundamentalmente a la formación que ofrece la Escuela y a los docentes que esta posee. “La carrera tiene principalmente dos ejes: uno dedicado a la kinésica y otro a la gestión de liderazgo y evaluación de proyectos. Y si bien el Currículum Mayor contempla para todas las carreras el aprendizaje de estas habilidades, nuestra Escuela tiene un modelo propio, enfocado en su campo laboral y que culmina con un examen de título en el cual el estudiante desarrolla un emprendimiento”, explica.

 Ante la pregunta de por qué es importante emprender en el campo de la Kinesiología, Lira responde que se debe principalmente a dos factores: “Esta es una carrera relativamente nueva en el área de la Salud y su campo de acción aún está en desarrollo. También los usos médicos del ejercicio han tomado un auge en los últimos años, como terapia para intervenir desde problemas vinculados a la alimentación hasta la psiquiatría. Todo estas son oportunidad para que los estudiantes vayan innovando”.

 En este sentido, Daniel del Canto, estudiante de 4° año y miembro del equipo que desarrolló “Propsens”, asegura que además de la malla curricular, algo importante son “las instancias que la carrera brinda.  Nuestro equipo participa en la Academia Científica de Estudiantes de Kinesiología y dentro del área de la investigación fuimos detectando necesidades en la disciplina. El espacio clínico es importante, pero también distinguimos nuevos avances que necesitaba esta área y que podían ser cubiertos desde aquí, en espacios como el Centro de Estudios del Movimiento Humano”.

 El joven también admite que existía la sensación de que la disciplina en general “se estaba quedando estancada, en terapias manuales y en lo que se sabía de su aplicación en el área clínica. Con esta búsqueda de innovar nos llenábamos del 'bichito' de querer dejar huella, de emprender”. 

En esto, el papel de los docentes ha sido fundamental y Fernando Lira los describe como “profes emprendedores”, que expresan cabalmente el sello que la carrera busca de imprimir los estudiantes. Incluso, 3 de los docentes fueron recientemente seleccionados para participar de las capacitaciones que se harán durante este mes de enero por parte de instructores del Hasso Plattner Institute de Alemania, como parte de la implementación del D-School de la U. Mayor. 

Una de estas docentes es Isabella Stranger, ingeniera comercial a cargo de la asignatura “Taller de Emprendimiento”, quien destaca que “el emprendimiento debe entenderse como una actitud que permite no solo crear nuevas empresas, sino también ser emprendedores dentro de la institución donde se desempeñan”.

En ese sentido, Stranger agrega que “parte de las actividades de la asignatura se hacen en un ambiente que promueve la creatividad y trabajo en equipo, utilizando las instalaciones del espacio de co-work La Fábrica, donde el mobiliario permite un ambiente lúdico e inspirador”.

Por último, Daniela Mardones, coordinadora de Exámenes de Título de la Escuela, menciona que este enfoque de formar kinesiólogos emprendedores se vincula con que “es una profesión enfocada al servicio. Entonces la empatía es un tema que se trabaja transversalmente en todos los años de estudio y en todas las asignaturas, permitiendo a nuestros estudiantes “ver donde muchos no ven” y estar siempre atentos a buscar soluciones distintas a las que ya existen”.