Jaque a la pandemia: ajedrecistas U. Mayor cuentan cómo han crecido este 2020

club-de-ajedrez-umayor

El Club de Ajedrez (@ajedrezumayor), liderado desde 2014 por el futuro médico Karl Attersjo, se ha transformado en una instancia que mezcla la competencia con momentos de distension y amistad entre sus integrantes. Así, a raíz de la exitosa serie "Gambito de dama" y la facilidad para jugar online, han tenido un año marcado por el alto interés en esta disciplina.

Fue en 2014 cuando Karl Attersjo llegó a nuestra Universidad a estudiar Medicina. 

Ya había pasado varios años jugando ajedrez en el colegio y observó que si bien en la Mayor existía una selección, le faltaba un pequeño impulso para hacerla crecer. Fue así como, junto a otro compañero, fundó el Club de Ajedrez de la U. Mayor, una instancia que, según dice, no solo permite competir, sino que por sobre todo socializar, involucrar a la comunidad y promover esta disciplina. 

Nuestro club está compuesto por casi 30 personas de varias carreras. De hecho, tenemos un par de funcionarios de la Universidad que participa”, comenta Karl, quien además destaca que el espacio es abierto y cualquiera que esté interesado en aprender, competir o simplemente jugar una partida, puede acercarse a ellos (el Instagram del club es @ajedrezumayor).  

Además de esta agrupación, Martín Salgado, estudiante de Educación Física, imparte un taller de iniciación que busca formar y reclutar a estudiantes que luego quieran ser parte de la Selección y representar a la Universidad en torneos y competencias locales y nacionales.  

Una herramienta para la vida 

Tanto Karl como Martín cuentan que comenzaron a jugar ajedrez a muy temprana edad. En el caso del primero, dice que su padre fue quien le enseñó a mover las piezas. “Luego, en el colegio, me metí a la selección y ahí se me dio una oportunidad de ir a jugar un torneo como reemplazante. Ese día me fue súper bien, la rompimos, ganamos todos los premios y ahí me enganché y nunca más lo solté, incluso juego desde el teléfono, ahora que todo es online”, afirma.  

El futuro médico sostiene que lo que más le gusta de este deporte es que “es distinto a cualquier otro, porque no necesitas una capacidad física puntual, sino que cualquier persona puede jugar ajedrez, y todos tenemos que empezar de cero”. 

“Además, el ajedrez es una herramienta muy útil en la vida, porque te hace estar un paso adelantado a las posibilidades, de tener un plan B, tener hábitos deportivos propiamente tal, la disciplina, el respeto. Te ayuda mucho para el autocontrol de impulsos y un sinfín de otras cosas. Es un deporte único”, agrega. 

El efecto “Gambito de dama” 

Ambos ajedrecistas reconocen que el éxito de la serie de Netflix “Gambito de dama” ha tenido un impacto en el interés de las personas por practicar ajedrez; es más, lo han notado en el hecho de que varios niños han llegado al taller de Martín motivados por la producción estadounidense.   

“Voy recién en el capítulo 2, pero es buenísima”, declara Karl. “Tradicionalmente el ajedrez se consideraba mucho un deporte de hombres, al igual que muchas disciplinas donde antiguamente no se incluía a la mujer, y esta serie es increíble como lo aborda. Demuestra que no solo los hombres tienen la capacidad estratégica, que las mujeres no tienen que jugar juegos de niñas y los niños juegos de hombres; rompe mucho el esquema y eso me encanta”, opina. 

Asimismo, resalta que “hoy las mujeres son buenísimas. Creo que pueden jugar incluso mejor porque tienen mayor inteligencia emocional y mayor prudencia a la hora de tomar decisiones”, junto con recordar que en club participan dos mujeres.  

Por otro lado, el estudiante de Medicina resalta que 2020, pese a la pandemia, fue “un gran año” para el club y la selección. “Crecimos mucho, tuvimos muchos jugadores nuevos. Somos la única selección que ha funcionado al 100% en su normalidad, porque con todas las aplicaciones online, las páginas que existen desde antes, etc., el ajedrez se puede jugar perfectamente online”.  

A nosotros nos pones un tablero online y ya podemos jugar. No necesitamos tener una pelota, una malla entre medio, no necesitamos el espacio, así que es mucho más fácil para nosotros. De hecho, hemos funcionado con los entrenamientos normales”, complementa Martín Salgado.