Charla// Eclipse total solar: Astrofísico entregó consejos para disfrutar de este próximo evento astronómico
El Dr. Ignacio Araya comentó que evento del próximo 2 de julio.debe ser visto con anteojos especiales, evitando mirar directamente al sol o utilizar radiografías o vidrios.
Una exitosa charla ofreció hace unos días el Dr. Ignacio Araya, astrofísico de la U. Mayor, quien entregó consejos a los estudiantes para disfrutar de este evento que se vivirá el próximo 2 de julio y que podrá apreciarse en el océano Pacífico, Chile, Argentina y también Uruguay.
De acuerdo al especialista, la Tierra tiene un ángulo de inclinación, con respecto a la orbita del sol, de 23,5°, el cual permite que se produzcan las estaciones del año. En el caso del fenómeno astronómico, este se producirá cuando la luna se interponga entre el Sol y la Tierra, generando una sombra que llegará al planeta.
En la jornada, además, el académico explicó a los entusiastas participantes cómo disfrutar de este fenómeno sin peligros, enfatizando en que deben protegerse los ojos con lentes con filtro especial y, por ningún motivo, utilizar elementos como radiografías o vidrio quemado. Además, aconsejó a los aficionados a la fotografía utilizar filtros y lentes especiales.
El Dr. Araya comentó que “ver un eclipse total de sol es un acontecimiento que rara vez se puede ver en la vida y cuando se ve es difícil olvidar. Es un acontecimiento realmente bello y le recomiendo a todos que traten de verlo”.
Por otra parte, destacó el interés que generó la temática entre los estudiantes, quienes no solo escucharon la presentación, sino que también hicieron múltiples preguntas y participaron de un concurso.
Un nuevo elemento químico
En la actividad, el académico también entregó el dato de un acontecimiento científico ocurrido el 18 de agosto de 1868, fecha en la que los astrónomos Joseph Norman Lockyer y Pierre Janssen tuvieron las primeras evidencias de la existencia de un nuevo elemento químico.
Al analizar los espectros se encontró una línea sobre el color amarillo (a 587.49 nanómetros), que no estaba asociada a ningún elemento conocido, dando paso al descubrimiento del helio, que en griego significa sol.