Pubs y discotecas son la fuente de ruidos molestos más denunciada del país

Esteban Ponce, docente de Fonoaudiología U. Mayor, explica que la música altera la tranquilidad mental, porque los sonidos van cambiando según la melodía. "Nuestro cerebro está hecho para tomar los sonidos como una alerta. Entonces, un sonido fuerte y que varía tiene un desgaste enorme en el ser humano porque lo pone constantemente en alerta", dice. Leer nota aquí