TENSIÓN//Analista U.Mayor por C. del Norte: “Podría ser la génesis de un conflicto con efectos insospechados"
Rodrigo Álvarez asegura que, de confirmarse que el régimen de Kim Jong-un logró colocar una ojiva nuclear en un misil intercontinental, se establecería “una línea roja que EE.UU. no podría aceptar”.
“Fuego y furia” fue lo que prometió ayer el Presidente de EE.UU., Donald Trump, al régimen de Corea del Norte, después de que el gobierno de Kim Jong-un informara que está "examinando cuidadosamente" un plan para atacar con misiles la isla de Guam, donde Washington tiene bases militares.
Las palabras del Mandatario norteamericano fueron interpretadas por analistas internacionales como un mensaje más del estilo de Corea del Norte que de la Casa Blanca, y su dureza no dejó indiferente a nadie. A ello se sumó un preocupante análisis emanado desde los servicios de inteligencia de EE.UU. que sugiere que Pyongyang habría logrado colocar una ojiva nuclear en un misil intercontinental.
“Lo que estamos observado es una creciente tensión en el Northeast-Asia en general y en la Península de Corea en Particular. De este modo, el que Corea del Norte hubiese alcanzado la capacidad de colocar una ojiva nuclear en un misil intercontinental (ICBM), podría ser la génesis de una confrontación militar con insospechadas consecuencias”, advierte el analista internacional de la U. Mayor, Dr. Rodrigo Álvarez.
“De esta forma, la confirmación de esta información sería el equivalente al establecimiento de una línea roja que los Estados Unidos no podría aceptar”, agrega el académico. La miniaturización de la tecnología nuclear es, en definitiva, “la etapa final de la proliferación nuclear”, sostiene.
Álvarez subraya que el problema central es que el programa nuclear y el programa de misiles de Corea del Norte han sido un “aliciente” para que los grandes actores involucrados (EE.UU., China y Rusia) se centren no sólo en encontrar una solución a la proliferación nuclear de Corea del Norte, sino que también “están en un proceso que les permita rearticular sus propios intereses regionales y globales”.
“Esto está dificultando encontrar una salida negociada que permita a todos los actores directamente involucrados alcanzar una solución”, explica.
De todas formas, el analista internacional no comparte la visión de algunos expertos que consideran que el programa nuclear norcoreano está avanzando más rápido de lo que se pensaba. “La temporalidad del proceso nuclear de Corea del Norte no es reciente. Todo lo contrario, Corea del Norte comienza su programa nuclear en los 50 e inicia su programa de misiles a mediados de la década de los 60, ambos durante el siglo XX. De este modo, ver la proliferación nuclear de Corea de Norte como un proceso de rápido desarrollo y consolidación, es un error”, opina.
Al hacer una lectura del mensaje lanzado ayer por Donald Trump a Corea del Norte, Rodrigo Álvarez señala que “la no proliferación nuclear es un tema complicado y que ha demandado el desarrollo una compleja arquitectura global de contención. Este contexto demanda tener al máximo cuidado con la tensión entre retórica y acción”.
“De este modo -añade-, una situación compleja de alta política tiene que ser cuidadosamente manejada y estar con mensajes que no tienen suficiente claridad en su profundidad y cumplimiento, sólo agrava aún más la situación”.