Cultura//Ana María del Río y la literatura infantil: “Los niños son lectores muy exigentes”
La escritora fue una de las galardonadas durante la apertura de la XXVI Feria del Libro Usado de la U. Mayor.
“Estoy con ganas de llorar, porque este es un premio proveniente de una Universidad que sí entiende lo que es la cultura”.
Estas fueron las palabras de la escritora Ana María del Río, una de las cuatro mujeres galardonadas durante la inauguración de la XXVI Feria del Libro Usado de la U. Mayor, debido al importante aporte que ha realizado al fomento de la lectura infantil en el país.
Es que la artista se ha transformado en una de las voces más reconocidas en este ámbito, sobre el que comenta: “Es el espacio del lector más interesante que se puede tener, ya que los niños son lectores voraces y muy exigentes. No compran porque está de moda, sino porque les tinca el libro… y eso es impagable”.
Autora de obras como “Entreparéntesis” (1985); “Oxido de Carmen” (1986); “De golpe, Amalia en el umbral” (1991); “Los siete días de la señora K” (1993); “Gato por liebre” (1995); “A tango abierto” (1996); “La bruja bella y el solitario” (2009); y “Lita, la niña del fin del mundo”, Ana María del Río comenta que para llegar a los más pequeños “es imprescindible hacerlos imaginar una situación que no conozcan, porque el niño acepta cualquier magia desde la palabra, siempre que sea lógicamente armada. Eso es algo muy interesante para trabajar y a la vez muy difícil”.
Pese a ello, reconoce que durante los últimos años la literatura infantil “es el terreno donde existe más surgimiento de actores nuevos. De hecho, escribir para niños es un desafío que tienen todas las editoriales, y las que no lo hacían ya lo están incorporando, ya que ellos siempre hacen demanda de los libros que les tincan, pero además están los programas escolares de lecturas mensuales, lo que configura un mercado emergente y, sin duda, exitoso”.
Así, Ana María del Río es enfática en comentar que ahora debe venir un mayor trabajo enfocado en el fomento de la lectura en la mayor cantidad de niños. Para ello, la escritora propone replicar lo que hacen algunas editoriales, las que además de sacar el libro impreso, también lo suben gratuitamente en formato PDF para todos los que quieran descargarlo o revisarlo online, adecuándose a las nuevas formas de consumo de literatura.