Investigación del CIAH revela novedoso método de recuperación del arte dañado
Catherine Burdick, dirigió un estudio iconográfico del lienzo “Monjes bajo un árbol”, perteneciente a una extraordinaria serie de pinturas coloniales sobre la vida de san Diego de Alcalá. A través del análisis de un grabado que sirvió de inspiración para la obra que está dañada, la investigadora logró recuperar su temática, aportando una nueva interpretación de la escena que muestra esta notable pieza del patrimonio sacro nacional.
Prácticamente desconocidos fuera de Chile, los lienzos de san Diego de Alcalá forman un ciclo extraordinario de pinturas coloniales compuesto por al menos 47 episodios, entre ellos el lienzo “Monjes bajo un árbol”, cuyo valor significativo está limitado al encontrarse dañado y separado del resto de la serie.
Aunque algunos historiadores del arte han sugerido que la obra, actualmente en la Pinoteca de la Universidad de Concepción, retrata la penitencia de los últimos años del santo en Alcalá de Henares, un estudio a cargo de la Dra. Catherine Burdick del Centro de Investigación en Artes y Humanidades (CIAH) U. Mayor, cuestiona esta interpretación y propone que la obra muestra un milagro que ocurrió al franciscano durante un arduo viaje en recompensa por su fe.
El estudio, “no solamente confirma que la obra en Concepción pertenece a la serie de san Diego de Alcalá en Santiago, sino también revela el tema de la obra fragmentada y su ubicación dentro de la serie colonial de casi cincuenta imágenes”, comentó la Dra. Burdick.
La historiadora del arte explicó que “en la época colonial, ante la necesidad de la corona española de evangelizar a la población local, se produjo una gran demanda por objetos devocionales, los cuales servían para cumplir tal objetivo”.
La serie de san Diego de Alcalá es la más extensa que se haya hecho sobre la vida del santo español del siglo XV y fue creada alrededor de 1710 en un taller en el Cusco para adornar el antiguo colegio franciscano del mismo nombre ubicado hasta el siglo XIX donde actualmente está la Casa Central de la Universidad de Chile en Santiago.
La comida milagrosa
Para recuperar el valor significativo de la obra colonial “Monjes bajo un árbol”, la Dra. Burdick realizó un detallado estudio de las fuentes iconográficas y biográficas que influyeron a los pintores de la serie de san Diego de Alcalá en el Museo Colonial de San Francisco. Allí, la investigadora ubicó un grabado en la Biblioteca Nacional de España que representa diversas escenas en miniatura de la vida de este santo en ultramar.
“Estaba segura de que este grabado podría mejorar nuestro entendimiento de las pinturas menos conocidas, dañadas y ausentes de la serie, incluyendo la pintura recortada que está en Concepción”, afirmó.
A partir de su hallazgo, la Dra. Burdick concentró su atención en los paralelos entre las pinturas de la serie cusqueña y los grabados que la inspiraron para concluir proponiendo una nueva interpretación del tema de la obra.
Así, la académica sostiene que la obra muestra un pequeño milagro que ocurrió en el sur de España justo antes del jubileo de 1450 en Roma. Fatigado y hambriento durante un viaje a pie desde Sevilla a Cádiz, una comida es enviada del cielo al fraile en respuesta, según sus biógrafos, a su fe y conducta ejemplar.
El estudio además sostiene que la pintura es más compleja que una simple reproducción del modelo que la inspiró, aportando una perspectiva decolonizadora de la creación artística de la época. La Dra. Burdick comentó que “aunque gran parte de los artistas del Perú virreinal modelaron sus obras a partir de grabados europeos, tales influencias típicamente proporcionaron solo una estructura compositiva sobre la cual se aplicaron iconografías, colores y adornos locales. Las obras de arte resultantes fueron, de hecho, de un estilo y tradición que pertenecen al mundo sur andino”.
Publicada en la revista Artes la investigación forma parte de un proyecto Fondecyt Regular dirigido por la Dra. Burdick, que incluye entre sus objetivos “descubrir y analizar las pinturas y grabados que existían en el Santiago colonial, con particular interés en las obras producidas en Cusco tal como la desconocida serie de san Diego de Alcalá”.
Actualmente, la investigadora está enfocada en conocer más sobre el mercado artístico entre Cusco y Santiago que existía en la época virreinal y de las fuentes locales e importadas que lo inspiraban para lo cual está analizando una base de datos de más que mil pinturas y grabados en los inventarios coloniales de Santiago.