CIENCIAS// Investigación internacional liderada por la U. Mayor estudia la supervivencia de las abejas en Chile
El trabajo de Patricia Aldea, directora del Centro CEAPI Mayor, se ha enfocado en el análisis del ácaro Varroa Destructor, que debilita su sistema inmune, alterando sus acciones cotidianas y disminuyendo su esperanza de vida.
Las abejas son una de las especies más importantes en el mundo, pero su sobrevivencia está en constante peligro. La lista de sus enemigos va desde la degradación de los suelos, los pesticidas, así como plagas y patógenos.
Las amenazas existen hace décadas, pero el problema es que las abejas están cada vez más debilitadas debido al cambio climático. Así, por ejemplo, el ácaro Varroa destructor, ataca a las colonias de abejas melíferas (Apis mellifera) y el 95% de las colonias de abejas en Chile está afectada por esta plaga, a tal punto que se convirtió en uno de los factores principales para que en los últimos cuatro años las abejas disminuyeran su tasa de supervivencia en un 33% anualmente.
Para estudiar este fenómeno, Patricia Aldea, directora del Centro para el Emprendimiento Apícola de la Universidad Mayor (CEAPI Mayor), lidera en Chile una investigación en conjunto con instituciones de Brasil, Uruguay, Argentina y Perú, quienes integran la Sociedad Latinoamericana de Investigación en Abejas (SOLATINA).
“En el país estamos trabajando para entender la varroosis, una de las enfermedades más comunes de las colonias a nivel mundial, pero que cada vez es más agresiva y difícil de controlar”, explica Aldea, quien agrega que “esta patología es causada por el ácaro Varroa destructor, que se alimenta de los cuerpos grasos de las abejas, un órgano que cumple una función similar a la del hígado de los mamíferos, encargado de detoxificar su organismo y estimular al sistema inmune”.
La investigación comenzó en marzo de 2019 y durará tres años. “En el caso de Chile, hemos visto que, producto de las altas temperaturas y de veranos más secos y largos, las abejas están en un severo estado de malnutrición”, asegura la investigadora, quien realiza mediciones cada tres meses en tres apiarios ubicados en Codegua, Concepción y Temuco, junto a investigadores de la Universidad Católica de Temuco y la Universidad de Concepción.
“Este ácaro se multiplica en las crías de las abejas y actualmente, debido a las condiciones de cambio climático, el período de producción de crías es más prolongado, llegando hasta el mes de mayo, favoreciendo así la reproducción del ácaro por más tiempo. Así, el patógeno se reproduce en mayor número, alcanzando niveles de infestación más graves”, agrega.
Las consecuencias de todas estas amenazas también estarían afectando la esperanza de vida de las abejas.
La situación con las abejas en Chile es crítica: si una obrera en primavera y verano vivía en promedio 60 días, actualmente vive cerca de 40, de los cuales sólo podrá ejercer labores de polinización durante 13- 15 días y no durante un mes, como lo haría una abeja sana. La larga sequía que ha afectado a la zona central del país también está teniendo un gran impacto.