CEAPI// Directora del CEAPI planea crear Unidad Educativa que lleve Talleres de Polinizadores a escuelas

Los favorables resultados de la experiencia con tres escuelas de la comuna de Huechuraba que Patricia Aldea (CEAPI) vivió con su “Proyecto Explora de Polinizadores” hacen que se busque darle una continuidad en el tiempo.


Patricia Aldea, es la directora del Centro para el Emprendimiento Apícola de Universidad Mayor (CEAPI) y del Proyecto Explora de Polinizadores, el cual enseña a los escolares la importancia de los polinizadores y el proceso de polinización, vital para los ecosistemas. Aldea cerró el 2018 con la satisfacción de haber concluido su proyecto con escolares con una evaluación más que positiva.

Las escuelas Ernesto Yáñez, Las Canteras y Santa Victoria, todas ubicadas en Huechuraba, fueron parte del Proyecto del Programa Explora de CONICYT en el que, mediante diversos talleres, los alumnos de 3°, 4° y 6° básico comprendieron el rol que juegan diversos animales en este proceso natural. En el primer semestre los niños y niñas aprendieron sobre los tipos de agentes que intervienen en la polinización (agua, aire y por polinizadores); los tipos de polinizadores y sus partes morfológicas relevantes para el proceso de polinización desde murciélagos hasta insectos; y las partes de las flores que atraen e intervienen en la fertilización. En el segundo semestre realizaron tareas más prácticas como experimentos en viveros, salidas a terreno y la visita a la Feria de Explora. También recibieron conocimientos de apicultura.

“Tuvimos una muy buena aceptación, la que fue cada vez mayor a medida que avanzábamos en el año, señala Aldea. Los niños de las distintas escuelas se fueron encantando con la polinización como tema, y del mundo de los polinizadores chilenos, su rol e importancia. Lo mismo sucedió con los profesores quienes fueron observadores de una forma diferente de interactuar con los niños, más cercana, alegre y utilizando distintas herramientas o técnicas para que cada niño o niña integrara el conocimiento con sus propias herramientas y maneras de aprender, reconociendo que no somos todos iguales y tenemos distintas capacidades. Estamos contentos y emocionados con el cariño recibido por los niños y los aprendizajes ganados por nuestra parte”, destacó.

Úrsula Videla, quien coordinaba los talleres, desarrolló una especial relación con los escolares, quienes respondían con mucho interés y a la vez con cariño a la monitora: “La capacidad de asombro viene implícita en el niño. Temática que le pongas a un niño despertará su curiosidad, si le permites descubrir por sí mismo a través de sus propios intereses (…) Los mismos niños me dijeron que nunca habían tenido profesores que los trataran con tanto amor”.

“Claramente este proyecto tenía características absolutamente diferentes a las que tiene una clase normal. Aquí se tocaban temas contingentes, enfrentando situaciones reales. El niño era el protagonista de su propio aprendizaje. No importaba si sabían escribir o no, lo que aquí importaba era que todos aportaban y aprendían con sus diferentes habilidades. Este proyecto además muestra que la ciencia no sólo sirve para desarrollar habilidades cognitivas, sino también habilidades blandas o relacionales tan esenciales para el siglo XX,” subrayó Videla.

Junto con el conocimiento adquirido sobre los polinizadores, los estudiantes adquirieron una serie de posibilidades de cómo ellos, como niños, pueden contribuir para reducir los impactos negativos medioambientales y causados por el ser humano sobre los polinizadores y la sustentabilidad de nuestro planeta.

La evaluación del Proyecto Explora es tan positiva que CEAPI considera crear una UNIDAD EDUCATIVA que lleve una selección de estos talleres a distintas escuelas de la región, como una forma de dar a conocer la importancia de los polinizadores, no sólo de las abejas, y los factores que los vulneran.