Actualidad// La agricultura podría superar al cobre como principal ingreso de Chile
La Sociedad Nacional de Minería ya advirtió que estima un crecimiento sectorial del 1% para 2019, mientras que las tasas de exportaciones de alimentos crecen al 8% y 10% anual. En este sentido, Iván Muñoz, experto en fruticultura específica de la Escuela de Agronomía, destaca el papel que el boom de las cereza chilenas tiene en este crecimiento.
Las proyecciones indican que serán enviadas más de 30 millones de cajas de cerezas chilenas a China, esto como parte de los preparativos para las celebraciones de Año Nuevo que cada 5 de febrero festeja el gigante asiático. Y según estimaciones del sector agrícola, esta temporada Chile podría exportará US$ 1.000 millones de este fruto, de los cuales un 90% será enviado a dicho país.
La bonanza de este fruto es un correlato de la situación general que vive la agricultura, que desde hace años mantiene tasas de crecimiento entre 8% y 10% anual, abriendo una posibilidad, no remota, de desplazar a la minería como primer ingreso de Chile. Esto, teniendo en cuenta también las proyecciones que ya ha hecho la Sociedad Nacional de Minería, desde donde advierten que para 2019 el crecimiento sectorial será del 1%.
Cerezas al mando
Pese a que suene algo descabellado, el inusitado éxito de las cerezas en Asia se debe a sus colores, verde y rojo, los que son sinónimo de ‘buena suerte’ en la cultura china, lo que dispara su consumo durante las fiestas de fin de año en dicho país, las que se celebran durante el mes de febrero.
“China es por lejos el principal destino potencial de la cereza chilena. Es un producto sumamente apetecido en dicho mercado, sobre todo para las festividades de fin de año, fecha en la cual la cereza chilena arriba con todo su volumen, sin mayor competencia de otros países productores y donde se obtienen retornos muy interesantes”, comenta Iván Muñoz, académico de la Escuela de Ingeniería Forestal de la Universidad Mayor.
Pero, ¿qué es lo que hace de la cereza la “niña bonita" de las frutas de exportación de nuestro país? Iván Muñoz responde: “Un factor muy destacable es su temprana época de producción, lo cual permite el arribo a los distintos mercados en épocas de festividades y alto consumo de este producto, no teniendo competencia de otros países productores”.
Y agrega: “Otro punto importante es que Chile cuenta con muy buenas variedades, con características destacables, como buen tamaño de fruto, buen color y muy buenas características organolépticas (sabor, textura, olor y temperatura). Estas variedades, además, tienen buenas condiciones de post cosecha, lo cual garantiza un buen arribo a los distintos mercados, con tiempos de viaje mayor a los 30 días”.
Efectivamente, la geografía y los climas que ofrece nuestro suelo resultan factores idóneos para el cultivo de este fruto rojo que, principalmente, crece en la VI Región (8.700 has), seguido por la VII Región (8.000 has.) y, en menor medida, la Región Metropolitana, con 2.000 hectáreas plantadas. Respecto a las condiciones de cultivo, estas regiones cuentan con una serie de características idóneas que el profesor Muñoz detalla de la siguiente forma:
- Suficiente cantidad de frío invernal para satisfacer los requerimientos de la especie (600-1.200 horas de frío bajo 7ºC)
- Ausencia de heladas, ya que el cerezo es una especie muy sensible, especialmente a heladas tempranas de primavera.
- Ausencia de lluvias primaverales o cercanas a cosecha, ya que influirían negativamente sobre la polinización y fecundación
- Ausencia de zonas ventosas que tampoco son recomendables por problemas de polinización y fecundación, lo que afectaría la producción.
A tener ojo
Pese a la prosperidad que muestra la cosecha de cerezas en Chile y su excelente recepción en mercados importantes como el de China, Estados Unidos y Latinoamérica, Iván Muñoz explicó que un factor que podría afectar la producción chilena es el Cambio Climático y sus efectos.
“Efectivamente el cambio climático podría afectar el cultivo por falta de frío invernal, aumentos de temperatura durante el período de crecimiento de la planta o mayores lluvias. Producto de lo anterior, podría haber también mayor riesgo de problemas sanitarios, debido a que mayores temperaturas harían aumentar el riesgo de plagas por mayor número de ciclos reproductivos y las lluvias harían aumentar la incidencia de enfermedades”, advirtió.
Pese a ello, los estragos del Cambio Climático sólo han afectado algunas cosechas puntuales, pero no han conseguido mermar el increíble éxito de este fruto en mercados competitivos, donde los meses de diciembre y enero se convierten en verdaderos sinónimos de buena suerte para los exportadores nacionales, y todo gracias a las tradiciones de la rica y milenaria cultura china.