Investigación// Investigador U. Mayor desarrolla método para medir cómo la vegetación reduce la temperatura en Santiago

La propuesta del Dr. Ignacio Fernández, investigador del Centro de Modelación y Monitoreo de Ecosistemas, fue desarrollada en base a datos recolectados por satélites y modelamiento espacial, y permite evaluar, entre otras cosas, en qué comunas de la capital la vegetación disminuye con mayor efectividad la temperatura de verano. Esta metodología podría ser aplicada para cualquier ciudad del mundo y fue dada a conocer en el número de julio de la revista Ecological Economics.

 

Se espera que el impacto del cambio climático en Chile generará un alza en las temperaturas máximas de verano, aumentando de esta forma la frecuencia de las olas de calor. En este contexto, el rol que juega la vegetación en las ciudades es de vital importancia para mitigar los efectos asociados al calentamiento global.

No obstante, los métodos que actualmente se utilizan para medir su efecto son poco precisos, pues no suelen considerar cómo la vegetación disminuye la temperatura en los alrededores ni tampoco toman en cuenta los distintos tipos de vegetación que hay en las ciudades.

Así lo reveló un estudio elaborado por el Dr. Ignacio Fernández, investigador del Centro de Modelación y Monitoreo de Ecosistemas de la U. Mayor y experto en ecología urbana, ecología del paisaje, servicios ecosistémicos y sustentabilidad, quien desarrolló un método para cuantificar este aspecto. 

Para esto utilizó datos de imágenes satelitales, sistemas de información geográfica y modelamiento espacial, utilizando la ciudad de Santiago como caso de estudio.

“La vegetación es importante como mecanismo de mitigación del cambio climático, para que las ciudades sean más agradables y vivibles. Desde hace un tiempo es importante medir esto, porque si tú tienes los datos, después puedes ayudar a proponer políticas públicas e informar a los tomadores de decisiones”, explicó el investigador, quien agregó que una de las principales particularidades de esta metodología es que se puede utilizar en cualquier parte del mundo, a diferencia de otras propuestas.

“Esta se caracteriza por basarse en datos empíricos, y a partir de ellos obtener las relaciones estadísticas que permiten determinar la distribución de la temperatura y en base a los distintos tipos de vegetación que hay en las ciudades”, explica Fernández.

Vegetación para disminuir la temperatura

La metodología fue aplicada en el área urbana de Santiago, donde se pudo comprobar que en la capital la vegetación más efectiva para disminuir la temperatura es la arbórea siempreverde, caracterizada principalmente por la presencia de especies nativas. Mientras que las superficies cubiertas con pasto, a diferencia de lo que se cree, son poco eficientes para disminuir la temperatura.

El estudio muestra que las comunas donde existe un mayor efecto de la vegetación en la reducción de la temperatura son Vitacura, Lo Barnechea, La Reina, Las Condes, Providencia, Peñalolén, Huechuraba, Ñuñoa, La Pintana y La Florida.

“En Santiago la cantidad de vegetación está vinculado con el nivel socioeconómico, por eso el efecto de la vegetación está acumulado principalmente en el sector oriente”, comentó.

Lo anterior no sería del todo malo, ya que, dependiendo del nivel de segregación residencial, las personas con mayor poder adquisitivo podrían estar traspasando la disminución de la temperatura producida en sus viviendas a los sectores aledaños.

Precisamente sobre este último tema, el Dr. Fernández se encuentra presentando en la Conferencia Internacional de Ecología del Paisaje desarrollada en Milán, Italia.

Ignacio Fernández es Doctor en Sustentabilidad de la Universidad Estatal de Arizona (Estados Unidos) y Máster en Recursos Naturales de la Pontificia Universidad Católica de Chile.

El artículo “A multiple-class distance-decaying approach for mapping temperatura reduction ecosystem services provided by urban vegetation in Santiago de Chile”, fue publicado en el número de julio de la revista Ecological Economics.