Fonoaudióloga ayuda a identificar trastornos de la deglución en personas mayores

Fonoaudióloga ayuda a identificar trastornos de la deglución en personas mayores

Vanessa Carrillo, académica U. Mayor, dice que los principales signos de la presbifagia se relacionan con el dejar de ingerir ciertos alimentos, desnutrición y aislamiento social. “si notan cualquiera de estos signos deben consultar a un especialista, para evitar el avance de la atrofia de las estructuras involucradas en la deglución”, indica.


Las personas mayores, señala la académica de Fonoaudiología de la Universidad Mayor sede Temuco, Vanessa Carrillo, son propensas a desarrollar distintas enfermedades, entre ellas, las de tipo neurodegenerativas, como el Alzheimer, y también accidentes cerebrovasculares.

En paralelo —dice la especialista— encontramos el envejecimiento, propiamente tal, que genera distintos trastornos de la deglución. “Las dos primeras generan complicaciones mucho más severas, por ejemplo, que las personas no pueden ingerir nada por la boca, porque puede ingresar alimento al pulmón”, advierte.

En tanto, el proceso de envejecimiento genera complicaciones deglutorias que son “esperables”, como el deterioro de las estructuras, pérdida de masa muscular y elasticidad, provocando atoros más frecuentes con alimentos que antes no generaban problemas.  

Entre ellos, los de tipo más seco y los que se desgranan con mayor facilidad. A esto se suma la pérdida de piezas dentales, que complica la ingesta de alimentos duros, como los frutos secos o el consumo de carne. “La línea de síntomas es bien amplia dependiendo del origen de la complicación”, indica Carrillo.

Según los expertos, los trastornos deglutorios comenzarían a manifestarse a partir de los 50 años, pero si el diagnóstico se ajusta a las personas mayores en Chile, sería desde los 60. “A esos trastornos deglutorios, en personas que no tienen ninguna alteración de base, se les denomina presbifagia”, aclara la académica.

En tanto, la disfagia, explica Carrillo, es secundaria a cualquier otra alteración, como las que mencionaba al inicio. “La disfagia es un trastorno neuromuscular secundario a una causa de base identificable, en tanto la presbifagia es un deterioro en el proceso deglutorio, pero que es normal producto de la edad”, precisa.

Atención especializada

Según añade la docente U. Mayor, es necesario acudir a un especialista cuando las personas ven limitado su consumo de alimentos y empieza a afectar socialmente. Por ejemplo, “en consulta escuchamos mucho que las prótesis no ajustan bien y que se atoran con frecuencia”, sostiene.

A raíz de esto, muchas personas mayores evitan salir a comer con amigos y familiares, porque no pueden tragar la carne o porque les da vergüenza pedir preparaciones especiales o porque tienen que consumir líquidos con bombillas. Asimismo, no se adaptan a los cambios que sufre su rostro, por la pérdida de musculatura.

“Lo importante es que, si notan cualquiera de estos signos, asistan a un especialista para evitar el avance de la atrofia de las estructuras involucradas en la deglución”, aconseja. Los tratamientos, en tanto, tienen que ver con “el fortalecimiento de la fuerza lingual, de la musculatura masticatoria, de los músculos que participan en general de la deglución, y también se hace un trabajo de estimulación de la sensibilidad intraoral, porque algo que uno ve con frecuencia es la pérdida del gusto, lo que hace que pidan comidas más condimentadas, porque no sienten los sabores”, concluye.