Según señala Fanny Bracho, directora de Kinesiología de la Universidad Mayor sede Temuco, la práctica regular de ejercicio potencia el sistema inmunológico, factor clave en un escenario pandémico. Respetar los protocolos de seguridad, elegir horarios menos concurridos y retomar las rutinas saludables de manera gradual, son algunas de las recomendaciones.

Aprovechar de mejor manera el nuevo escenario sanitario y el buen clima que ofrece la primavera, serían claves para reconectarse con las actividades físicas al aire libre. Así lo cree Fanny Bracho, directora de Kinesiología de la Universidad Mayor sede Temuco, quien entrega algunas recomendaciones para no fallar en el intento.

“Los largos meses de encierro y restricciones de movilidad han mermado la posibilidad de realizar actividad física con la frecuencia y el tipo deseado. Tal hecho debe preocupar, no solo por la disminución de nuestra condición física o nuestra apariencia, también por el impacto que ha tenido a nivel emocional”, advierte la especialista.

En este escenario, donde la salud física y mental han sido afectadas por las restricciones impuestas por la pandemia, la directora Bracho remarca la importancia que tiene la práctica regular de ejercicio, ya que potencia el sistema inmunológico, factor clave en tiempos de coronavirus.

“Las investigaciones concuerdan que la práctica regular de ejercicio mejora positivamente la respuesta de las funciones inmunes innatas y adaptativas, generando una reducción de la respuesta inflamatoria sistémica y la disminución del riesgo de infección”, complementa la experta.

Pero, ¿de qué manera debe ser la reincorporación a la actividad física al aire libre? Según precisa la académica, esta debe ser gradual, idealmente entre tres a cuatro veces por semana, para luego intentar salir todos los días. “Se debe comenzar con periodos cortos, para luego ir aumentando en tiempo”, agrega.

Lo mismo sucede con la intensidad del ejercicio, que debe ser liviana en un inicio para luego ir progresando. “Es muy importante comenzar con un calentamiento de al menos cinco minutos, que incluya movimientos de estiramiento y suave rotación de las articulaciones. De esta forma, se pueden prevenir lesiones como desgarros, tendinitis, lumbalgia o esguinces”, aconseja.

Algunas recomendaciones

Las recomendaciones para realizar actividad física al aire libre de forma segura, incluyen mantener la distancia mínima de 1,5 metros entre participantes, realizar lavado de manos antes y después del ejercicio y no compartir alimentos ni líquidos.

Respecto al uso de mascarillas, los expertos indican que, al realizar ejercicio vigoroso como carreras o ciclismo de largo aliento, la mascarilla puede afectar la capacidad de respirar cómodamente, pero no interfiere en el intercambio gaseoso de los pulmones, por lo que su uso es seguro.

“La sugerencia, ahora que estamos en primavera y los días son más cálidos y largos, es salir a caminar, trotar, andar en bicicleta o sumarse a algún grupo que realice actividad física dirigida, siempre respetando los protocolos de seguridad. Si se quiere salir de forma individual o familiar, hay que aprovechar los espacios abiertos y elegir horarios menos concurridos. Después de un año y medio de encierro, por fin llegó nuestro momento de salir y disfrutar siendo activos, aprovéchalo”, finaliza la académica.