NUTRICIÓN//Académica entrega recomendaciones para obtener vitamina D durante el confinamiento
Rocío Martínez, nutricionista y docente de la sede Temuco de la Universidad Mayor, aconseja una alimentación balanceada y acudir a especialistas en el caso de quienes tengan necesidades aumentadas de este nutriente.
En medio del confinamiento y ante la imposibilidad de salir de nuestros hogares, hay algunos nutrientes que solo se obtienen con la exposición a la luz solar. Dentro de ellos se encuentra la vitamina D, importante para nuestros huesos, ya que ayuda en la absorción de calcio y fósforo.
Rocío Martínez, académica de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad Mayor sede Temuco, nos entrega algunos consejos y recomendaciones para evitar la carencia de vitamina D en nuestro organismo.
“La vitamina D posee como principal función la mantención del equilibrio de calcio y fósforo en nuestro organismo, importantísimo para nuestra salud ósea. Además, se ha estudiado que la vitamina D tiene otras funciones como: mantener el equilibrio en la proliferación y diferenciación celular, protegiéndonos de cáncer; favorece el funcionamiento del sistema inmune, disminuye infecciones y tiene efectos antiinflamatorios; incluso, contribuye a mantener los niveles de presión arterial normales”, destaca la profesional.
Fuentes de vitamina D
La época invernal, donde el sol es un bien escaso, y el encierro al que estamos sometidos por la pandemia, son factores que no ayudan a obtener de manera eficaz esta importante vitamina para nuestro organismo. Es por esto que la académica recomienda obtenerla de algunos alimentos. “La vitamina D se encuentra principalmente en pescados grasos (salmón, sardina, atún y bacalao) y en huevos, carnes y leches. Hay muchos alimentos que están fortificados con vitamina D”, señala Rocío Martínez.
Pero, no solo la alimentación es suficiente, ya que como señala la experta en nutrición, la principal fuente de esta vitamina es la exposición a los rayos UV, por tanto, quienes tienen necesidades aumentadas de vitamina D deben buscar alternativas. “En época de confinamiento, además de consumir una alimentación variada, se debería evaluar la suplementación de esta de manera farmacológica, previo a exámenes y supervisión de un especialista”, aconseja la docente.
Déficit y consecuencias para el organismo
Tanto para adultos como para niños, la falta de vitamina D por periodos prolongados puede afectar la salud ósea y ciertas funciones que ayudan a mantener el equilibrio en la proliferación y diferenciación celular protegiendo al organismo del cáncer.
“Carencias menores de la vitamina se asocian a cansancio, dolor o debilidad muscular, sobre todo en la parte inferior de la espalda y en las caderas, problemas para la recuperación de fracturas, caries, detención de crecimiento en los niños, debilidad muscular, etc. Estos síntomas solo aparecen cuando los niveles se mantienen muy bajos durante mucho tiempo”, señala Martínez.
“La deficiencia más grave de vitaminas se manifiesta en niños, el raquitismo que incluye deformaciones óseas y en adultos ocurre osteomalacia que se caracteriza por dolores óseos, a nivel dorso lumbar y dificultad en el movimiento”, concluye la profesional.