Alumni es la nueva directora de Medicina Veterinaria de la sede Temuco
Se trata de la Dra. Fernanda Araneda Aránguiz, quien es magíster en Etología y Bienestar Animal y que desde 2020 hasta 2022 se desempeñó como directora docente de esta carrera, asumiendo hasta abril del presente año el interinato de esta unidad académica.
A partir de este mes, la Dra. Fernanda Araneda Aránguiz dirigirá la carrera de Medicina Veterinaria de la Universidad Mayor sede Temuco, un desafío que —según revela la académica— asume con ilusión y mucha responsabilidad. Y lo hace apoyada por el que define como un gran equipo académico y administrativo que día a día da lo mejor por los estudiantes.
“Favorecer esa sinergia es parte de los desafíos para que nuestra carrera aporte a la sociedad profesionales de excelencia, con perfil emprendedor y con un sólido compromiso ético en su quehacer”, aclara la profesional.
En esa línea, la autoridad académica dice que “los desafíos actuales de la formación de médicos veterinarios, exige que cuenten con herramientas que les permitan enfrentar los nuevos escenarios, entendiendo el contexto dinámico y cambiante en el que se ejerce actualmente la profesión”.
Uno de esos desafíos, complementa la Dra. Araneda, implica promover el bienestar de los animales, acorde a los lineamientos de la Organización Mundial de Sanidad Animal. Por ello, “nuestra carrera tiene la posibilidad de posicionarse como referente en esta materia, relevando la inclusión de la simulación clínica dentro de las estrategias de enseñanza aprendizaje”, remarca.
“Espero podamos fortalecer y estrechar las relaciones con la comunidad en la cual estamos insertos como carrera, vinculándonos de manera activa y sobre todo significativa con el entorno regional, reforzando nuestro compromiso público”, añade la directora Araneda.
Alumni U. Mayor
La Dra. Araneda es médico veterinario de la Universidad Mayor sede Temuco, magíster en Etología y Bienestar Animal y diplomada en Docencia Efectiva y en Metodología de la Investigación Cuantitativa.
En su trayectoria en la sede regional, se ha desempeñado desde el año 2015 como académica de esta carrera en asignaturas de la línea de salud animal, desde el 2020 al 2022 como directora docente, y desde julio de 2022 a abril de este año como directora interina de esta Unidad Académica.
Además, entre sus principales áreas de interés e investigación están la etología clínica y aplicada y el bienestar animal de especies de compañía y producción.
Asimismo, la Dra. Araneda es miembro de la directiva de la Asociación de Etología Clínica Veterinaria de Chile (ASECVECH), coordinadora regional de la Comisión de Tenencia Responsable de Animales de Compañía del Colegio Médico Veterinario de Chile y miembro de la Asociación Chilena de Bienestar Animal (ACBA).
-¿Qué herramientas le entregó el haber estudiado en pregrado en la Universidad Mayor?
-La Universidad me entregó una sólida formación en gestión y emprendimiento, lo que iba más allá de mi formación básica como médica veterinaria. Ese sello, de no solo abarcar la medicina como tal, sino que prepararte para formular y evaluar proyectos, gestionar sistemas productivos, innovar en las diferentes áreas de especialidad, hasta el día de hoy marcan la diferencia entre un médico veterinario de la Universidad Mayor, versus de otras casas de estudios. Como exalumna, uno lo valora en el momento en que se refleja como una ventaja competitiva frente a otros candidatos en el ámbito laboral. Por otro lado, fue la primera institución en añadir a su plan de estudios como asignatura obligatoria el estudio del comportamiento y el bienestar animal, algo que sin duda nos entregó herramientas que cada vez eran más requeridas debido a los lineamientos internacionales que rigen la Medicina Veterinaria, y por lo tanto fueron cada vez más solicitadas por los empleadores. En esos años las autoridades de la carrera tuvieron la visión de futuro de que hoy en día sería una necesidad y una obligación tener ese sello en los planes de estudio de la profesión.
-¿Qué es lo que más recuerda de aquella etapa de formación?
-De mi etapa de estudiante recuerdo haber estado siempre muy involucrada con la Escuela. Previamente yo estudié otra carrera, en otra ciudad. Ahí era un número más. Cuando llegué a la UM mis profesores conocían mi nombre, podía hablar con ellos y con los directivos, podía manifestarles mis ideas y las ganas que tenía de aportar. Con un grupo de compañeros formamos parte de uno de los primeros Centros de Estudiantes y ahí cambió la visión que tenía basada en mi experiencia previa. No era Centro de Estudiantes versus Carrera, al contrario. Todos trabajamos por un fin común, en base al diálogo, el respeto y la empatía; y ese sentido de pertenencia, nos llevó a generar instancias y actividades que aún recuerdo con cariño.