Hábitos saludables y realizarse exámenes preventivos periódicos serían claves para ayudar a prevenir este tipo de eventos, indica el académico de la carrera de Medicina de la Universidad Mayor sede Temuco, Dr. Óscar Jiménez Leighton.  

A seis años de la muerte de Gustavo Cerati, cantante y líder de la banda argentina Soda Stereo, a causa de un evento vascular isquémico, el que derivó en un accidente cerebrovascular (ACV), y que lo mantuvo en coma durante 4 años, persisten las dudas sobre esta enfermedad, una de las principales causas de muerte en Chile.

Es por esto que en las próximas líneas, el neurólogo y académico de la carrera de Medicina de la Universidad Mayor sede Temuco, Dr. Óscar Jiménez Leighton, responde a interrogantes como los tipos de accidente cerebrovascular, sus causas y factores de riesgo, entre otras.

De acuerdo a un informe del Departamento de Estadísticas e Información del Ministerio de Salud (DEIS-Minsal), las atenciones de urgencia, producto de la pandemia, han sufrido importantes cambios. Uno de ellos es la disminución en la consulta por ACV, una de las principales causas de muerte y discapacidad en Chile.

En el caso de consultas de urgencia por síntomas asociados a esta enfermedad, la caída llega a un 37% menos respecto a agosto del 2019.

Por lo tanto, el temor a contagiarse de coronavirus sería uno de los principales motivos por el cual la población no está acudiendo a las urgencias, aun cuando presenta síntomas de esta patología que representa un peligro inminente, tanto por las secuelas neurológicas como por su alta tasa de letalidad.

De hecho, de acuerdo a cifras del Ministerio de Salud, es la segunda causa de mortalidad prematura en Chile.

Por ello es importante estar al tanto que esta enfermedad es de carácter grave y que requiere atención médica de urgencia. Así lo indica el Dr. Jiménez: “Los síntomas del ataque cerebrovascular son de instalación aguda, de inicio brusco o instalados en pocos minutos”.

“Es una enfermedad producto de alteraciones de la circulación del cerebro. La mayoría de los ataques cerebrovasculares corresponden a interrupción del riego sanguíneo, llamados por ello ataque cerebrovascular isquémico. Una proporción menor es producto de la ruptura de los vasos sanguíneos del cerebro, provocando hemorragias en el cerebro, llamados por esto ataque cerebrovascular hemorrágico”, agrega el profesional.

Síntomas de un ACV

Según explica el facultativo, un ACV es producto de afecciones al corazón con compromiso de las arterias que irrigan el cerebro. “Más de la mitad de los infartos cerebrales corresponden a interrupción de la circulación de una región del cerebro producto de un coágulo formado en el corazón, los que se producen en relación a alteraciones del ritmo cardíaco”, advierte.

Otras causas mencionadas por el profesional serían la fibrilación auricular (frecuencia cardíaca irregular y ocasionalmente rápida que suele provocar irrigación sanguínea deficiente) y la oclusión de las arterias cerebrales, provocada por el depósito de colesterol en las paredes de los vasos sanguíneos, estrechando el paso de la sangre. “Las hemorragias cerebrales se producen por enfermedad de los vasos sanguíneos producto de la hipertensión arterial sin tratamiento por varios años”, complementa.

Asimismo, el Dr. Jiménez señala cuáles serían los síntomas de que una persona que está sufriendo un ACV y necesita atención médica de urgencia: “Debilidad de una extremidad, asimetría de la cara, alteración del lenguaje, trastorno del equilibrio. Para las hemorragias en el cerebro, el dolor de cabeza de inicio brusco, que podría asociarse a vómitos, trastorno de la conciencia o pérdida de fuerzas de una parte del cuerpo”.

Prevenir un ACV

Al ser una enfermedad neurológica, el ACV requiere de atención médica inmediata para evitar que el paciente tenga secuelas neurológicas graves. Esto puede ocurrirle a cualquier persona y de un momento a otro, independiente de su edad, sexo u origen. No obstante, existen factores de riesgo que hacen aumentar la probabilidad de padecerlo.

“Es importante reconocer los factores de riesgo para padecer una enfermedad cerebrovascular. El principal factor de riesgo conocido es la Hipertensión Arterial, además de la Diabetes Mellitus. Los niveles elevados de colesterol, el tabaquismo, y las enfermedades del ritmo del corazón, entre los más importantes”, apunta Jiménez Leighton.

Según añade el facultativo, para prevenir un infarto cerebral o una hemorragia cerebral debemos realizarnos un examen periódico de salud y tener hábitos saludables. “Debemos cuidar los números: presión arterial, glicemia, colesterol, peso, y dejar de fumar”, concluye.