Manuel Gedda, director de Turismo Sustentable de la sede Temuco, dice que “se deben inyectar más recursos a las medidas anunciadas por el ministerio de Economía y que se debe generar un subsidio directo para incentivar a las personas a viajar por Chile”.

A principios de esta semana el ministerio de Economía presentó el nuevo Plan Nacional de Turismo, que contempla la entrega de financiamiento, protocolos sanitarios y trabajo conjunto en el sector, para reactivar a las pymes que han sido golpeadas por la crisis sanitaria que vive el mundo.

El programa, que fue desarrollado junto a la subsecretaría de Turismo y Sernatur, se sustenta en tres ejes y está pensado para focalizar el apoyo y la ayuda en el mediano plazo.

Por una parte, busca activar al sector de manera gradual, de aquí a septiembre, cumpliendo con protocolos sanitarios; también, considera subsidios por casi $7 mil millones, los que se entregarán a través de Sercotec en las próximas semanas.

Y, finalmente, incluye un plan de promoción para incentivar los viajes dentro de Chile, para el que se destinarán unos $3 mil millones, entre montos de Sernatur y del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR).

Adicionalmente, a través del FNDR, las regiones tendrán un presupuesto de más de $2 mil millones para difusión y promoción, donde La Araucanía lidera la inversión con $500 millones, seguida por Atacama con $400 millones.

La reactivación, señalan las autoridades, dependerá de cómo vaya evolucionando la pandemia y también de la capacidad de cada empresa para poner en marcha las distintas exigencias sanitarias detalladas en el protocolo.

Análisis regional

“En términos generales este nuevo Plan Nacional de Turismo va en la línea correcta, aunque tiene algunos detalles”, dice Manuel Gedda, director de la carrera de Turismo Sustentable de la Universidad Mayor sede Temuco.

“En el contexto actual me parece positiva la implementación de protocolos sanitarios, eso es fundamental, es un avance claro y positivo, siempre y cuando se ejecuten bien”, precisa.

Asimismo, valora los subsidios que se entregarán a través de Sercotec. “Son necesarios para diversificar la oferta, generar nuevos polos turísticos que estén adecuados a la realidad actual. Espero que de eso se trate este fondo que se va a implementar en las próximas semanas”, puntualiza.

“Es muy importante hacer difusión y promoción de los productos, reactivar la oferta e identificarla más claramente. Ahí hay un desafío por región, por destinos. Entonces, la inyección de recursos es positiva”, advierte Gedda.

Lo que no queda claro para el experto es si esos fondos serán concursables. “Eso significaría hacer proyectos, lo que podría complicar el acceso inmediato a estos recursos para las empresas”, agrega el académico.

Subsidio directo

Para el director de Turismo Sustentable hay un cuarto eje que tendría que haberse considerado. Se trata de un subsidio directo con el cual —explica— se logre incentivar a que las personas adquieran productos turísticos.

“Con la situación económica que están viviendo muchas familias, los viajes se transforman en aspectos secundarios. Entonces, ¿cómo incentivamos al usuario turístico?”, se pregunta el experto.

En ese sentido, llama su atención lo que está haciendo Sicilia, Italia, “donde el gobierno regional financia parte del viaje de los turistas que elijan ese destino. O el caso de Japón, que ofrece financiar parte del pasaje”, cuenta.

En el caso de Chile, el turismo interno llevará la delantera a medida se vaya reactivando el sector. “El turismo interno va a ser lo potente y el Plan apunta a eso. Así que son buenas medidas. Pero, igual habrá un porcentaje de turistas que vendrá desde el exterior, y podríamos pensar en un subsidio más atractivo, porque Chile no es un destino barato, tanto para chilenos como para extranjeros”.

En definitiva, “se deben inyectar más recursos a estas medidas que son buenas y, además, generar un subsidio directo con el cual se incentive a las personas a viajar, con ofertas atractivas, tanto en estadía como en los pasajes”.

Sobre el futuro del sector, Manuel Gedda sostiene que se debe apuntar a la temporada estival. “Aún con todos los perjuicios que puede generar eso, no se ve que existan posibilidades reales de entrar antes a un desarrollo pleno de la actividad turística”, concluye.